Una humilde familia vivĆa sus tiempos en cercanĆas a una sociedad importante, de clase. Y es que un jĆ³ven tenĆa a sus padres trabajando para ellos. Si bien este chico llevaba una buena vida, habĆan rastros de menosprecio por su clase social.
Este jĆ³ven se llamaba Steven y buscaba que se lo incluyan. Algo un tanto difĆcil entre diferencias sociales en un lugar donde habĆan muchos aires de grandeza. Se trataba de familias de renombre, compuestas de profesionales generaciĆ³n tras generaciĆ³n.
Su padre, un mayordomo y su madre una mucama, eran sometidos a maltratos psicolĆ³gicos, es decir, los trataban como seres inferiores incapaces de ser algo mĆ”s que la simpleza de sus oficios entre otras palabras hirientes.
Steven en cambio proyectaba un futuro alentador. HacĆa invenciones en sus tiempos libres pero tambiĆ©n estudiaba y progresaba en ello. Se las ingeniaba perfectamente para la venta de sus productos. AĆŗn asĆ no conseguĆa grandes ganancias y su apariencia distaba mucho de lo que tenĆa en mente. Estamos hablando de que, en su mayorĆa, vestĆan trajes caros y elegantes.
Fue entonces que decidiĆ³ ir mĆ”s allĆ” y presentarse ante una de las familias mĆ”s importantes. Sus intenciones estaban en que se lo incluyan en las investigaciones sobre ciertos artilugios y maquinarias. Era muy hĆ”bil para deducir la lĆ³gica antes de su construcciĆ³n, harĆa un muy buen trabajo.
Esta era la familia Vanderhol. Con mucho poder e influencia sobre las demĆ”s, tenĆan propiedades distribuidas por la ciudad dedicadas a distintos mercados. Entre ellas, una bodega de unos exquisitos vinos muy refinados.
A Steven se lo invitĆ³ a dialogar sobre el asunto en una gran sala subterrĆ”nea de esa bodega. Fue entonces que se encontrĆ³ con varias personas vestidas de negro con una capucha que dificultaba ver su rostro sumado a que tenĆan unos antifaces rojos. Claramente se alarmĆ³ e intentĆ³ huir. Fue en vano.
A pocos metros de esa sala se podĆa apreciar un evento aterrador. Era el sacrificio de tres jĆ³venes de distintas edades, quizĆ”s se trataba de hermanos por sus parecidos. Lo cierto es que entre lamentos y sangre, esa sala fue un lugar atroz, una escena muy perturbadora y sin igual.
Entonces fue que Steven pensĆ³ que serĆa su fin. Estaba todo dado para que asĆ lo sea, sin embargo, se lo acercĆ³ allĆ para ser parte de la familia. HabĆan visto en Ć©l algo que a ellos les servirĆa. La inclusiĆ³n.
Ya que no estarĆa en peligro se le permitiĆ³ escoger entre dos caminos, el de seguir como hasta ahora, sin avanzar en sus proyectos o el de a costa de ser parte de una vil sociedad, hacer sus sueƱos realidad.
Para entonces Steven serĆa un seguidor mĆ”s de SatĆ”n. HabĆa elegido el camino del mal para lograr sus objetivos y proyectos. ObtendrĆa el apoyo, dinero, y lo mĆ”s importante para Ć©l, ser incluido a cambio de satisfacer los pedidos de los seres sirvientes del inframundo.
Entre las vĆctimas de esta familia estaban sus padres. No tuvo menor piedad y avanzĆ³ con el evento. QuizĆ”s por ser diferente a ellos o tal vez por ser hijo de gente de baja clase. Lo cierto es que habĆa nacido un nuevo demonio.
Este vil ser serĆa quiĆ©n de ahora en mĆ”s represente a la secta Vanderhol. La sociedad elitista que sacia sus males con el resto de los mortales.